Volvemos a los
jueguitos, volvemos a los viejitos. Porque el público se renueva,
porque la moda se ciclica, por eso… Retro-Japón.
En la primera mitad
de los 90's, y la más piola del mundo era Sonic, sin ninguna duda.
Todo el mundo quería tener su Sonic, y si no era posible, te hacías
uno parecido, porque claro, vendía. Es en esa movida que salen miles
de juegos protagonizados por animales antropomórficos y coloridos,
re cool man, onda Aero The Acrobat, Rocket Knight o Dynamite Heady,
por poner algunos ejemplos.
Una pequeña
compañía japonesa no quería quedarse afuera y conseguir parte de
la torta para gastarla en un puterío y en cocaína barata rebajada
con yeso… Calculo.
Esa compañía que
te digo es Game Freak… Quizás te suene porque en 1996
hicieron un jueguito medio pelo llamado Pokémon... SI PAPÁ, SON
LOS DE POKIMAN, SE LLENARON DE GUITA!!
Pero
dejenme hacer un poco de historia. Juego Loco inició allá por 1989
como un par de amigos que de coger no hablaban, sino de jueguitos
(como vos y yo, aceptalo), por eso se pusieron a editar un fanzine
sobre fichines… Algo así como la Club Play, pero ponja. Y como la tenian clara, dijeron: “ya fue
chabón, vamo' a hacer jueguito, esta es la nuestra”.
Ya
para 1994, con un par de juegos a cuesta, y justo antes de Pokiman,
logran que Sega les publique otro jueguito en la Genesis: Pulseman.
Lo
más loco de todo esto es Satoshi Tajiri, director y creador de Game
Freak (junto a otro chinoka, Ken Sugimori). Si ustedes buscan en
Google su nombre les va a aparecer la imagen de este tipo:
 |
| Este no es Satoshi Tajiri. |
 |
| Este es Satoshi Tajiri. |
El
primer chabón es un viejo de Pokémon Company, y si ustedes se ponen
a ver algunos videos en YouTube por ejemplo, van a ver éste error, y
mucho. Por eso chicos, chequeen sus fuentes y no crean todo lo que
ven en Internet… Excepto esto, claro.
En
fin, retomando el tema de alguna forma sin parecer sospechoso,
Pulseman fue un juego exclusivo de la Sega Genesis (Mega Driavu en
Japón), que nunca salió de país natal.
Pulseman
es un juego de plataformas bastante clásico, niveles líneales,
saltos y golpes a diferentes malosos. La historia va de que en el
siglo 22, nace un pibe mitad programa informático, mitad niño de
verdad. Ahora con 18 años (mayor de edad, todo legal) (ponele) es
parte de la División de Delitos Informáticos de la Federal, y debe
detener a su padre creador, que ahora se convirtió en un doctor mala
onda y está haciendo cualquiera en todo el mundo.
Lo
interesante del fichin es el set de habilidades que posee nuestro
personaje:
-
Con el pad direccional simplemente te moves.
-
Con el botón C saltas.
-
Con el B golpeas (si haces arriba y golpe hace una patada ascendente
muy útil).
-
Con el A tira un poder especial que requiere de electricidad…
Ohhh,
la querida electricidad, una habilidad especial que nuestro personaje
obtiene al alcanzar altas velocidades (o apretar dos veces adelante,
de nada).
-
Cuando estás cargado, el botón B además de golpear tira una
descarga eléctrica capaz de golpear enemigos a distancia.
-
Acá es cuando el A funciona: nuestro personaje se transforma en una
bola invulnerable, y que también hace daño. Siempre lo hace de
forma descendiente en diagonal, por lo que algunas partes
plataformeras requieren de su uso.
A
estas mecánicas se le suman algunas contra-mecánicas, como el agua,
que anula todo efecto de la electricidad, pero solo está presente en
algunos niveles.
Ahora,
en cuanto a los niveles, la verdad es que no son muchos, 8 con
diferentes locaciones que van por Japón, USA, Australia y la
Matanza, cada uno con partes en el mundo real y el mundo digital.
Esto le da mucho estilo y sobre todo cierta variedad de escenarios.
Cabe destacar algunos trabajos que hicieron en relación a los
fondos, con efectos simil Mode 7 (de la SNES) pero sin el Chip mágico
ese… Si bien te marean un poco, el efecto está.
La
música, compuesta por Junichi Masuda, el mismo de Pokémon, es
correcta. Son pocas las melodías que tiene, pero variadas y muy
acordes al juego. No es de esos Soundtracks esenciales, pero si uno
de bueno para arriba.
Creo
que el único punto flojo que tiene el juego es el diseño de
enemigos… Son todos muy simples y poco inspirados. La verdad que no
hay variedad, cosa que también sucede con los jefes, hay una bola,
un árbol y un Pulseman negro porque la así era la época. En
contraposición, el diseño de personajes es hermoso, los sprites
tienen gran definición y muchos detalles.
El
juego es bastante corto, para terminarlo en una sentada. Si bien son
8 niveles, son bastante extensos, sumado a que los jefes requieren de
cierta práctica en unas 4 o 5 horas podemos estar viendo los
créditos finales. Con esto quiero decir que es un juego más o menos
exigente, no es fácil, pero tampoco es la japoneseada esa de ponerte
bosses imposibles.
En
resumen, es un muy buen juego, que salvo por la física de los saltos
(simil Castlevania) ha envejecido realmente bien. Los controles
responden, el planteo es interesante, e incluso emana la esencia
clásica de lo que era un videojuego en esos años.
Ahora
sí, el link, en Mega y con el emulador…
Además
te dejo la yapa, el truquito para elegir el nivel:
-
Con el control en el puerto del jugador 2, tenés que apretar A, B,
C, C, B, A cuando aparezca el cartel de Sega.
Y
nada, eso fue Pulseman para el Sega y espero que les haya gustado.
Chau.
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